sábado, 11 de julio de 2009

GALERIAS DE FOTOS

Galería de fotos de las poetisas que participaron en los recitales que se realizaron en el marco de la VII Asamblea Anual del PECC
(Parlamento de Escritores del Caribe)
Margarita Galindo Steffens, cuando participaba en uno de lso recitales
La poetisa Cecilia Muñoz, de Medellín, lee sus poemas

La poetisa Nora Carbonell, participa en uno de los recitales

La escritora Anastasia Espinel Souarez, de nacionalidad rusa, cuando intervenía con su poenencia "El cuento Histórico".

Maríaelena Aldana, participa en el recital poético

La poetisa corozalera, Margarita Vélez Verbel, cuando participaba en la gala poética

Beatriz Eugenia Gallego, de Calarcá, cuando partcipaba en uno de los recitales
La escritora Iveth Noriega
participa en una lectura de poemas
Poetisa Fadir Delgado Acosta, cuando leía su poenencia "La literatura como posibilidad ciudadana"

lunes, 6 de julio de 2009

Mensaje de Toño Mora

Joce
Felicitaciones por el éxito del Parlamento. Para mí, que he tenido la muerte tan cerca últimamente, el Parlamento renueva mi compromiso con la literatura que es una de las razones que me motivan a seguir viviendo. Gracias por tu deferencia y por tu amistad.
Un abrazoAntonio Mora Vélez. PD.
Aporvecho para proponerte los nombres de Germán Espìnosa. Héctor Rojas Herazo y Alvaro Cepeda Samudio para homenajear en el próximo. En el evento de que se prefiera a un escritor vivo, popongo a Ramón Illán Bacca. Y para sugerirte que no se programen tantas ponencias para dar más espacio a los foros y a actividades de integración.

domingo, 5 de julio de 2009

Conclusiones

Conclusiones del VII Parlamento de Escritores del Caribe Colombiano
Homenaje a Meira Delmar, Judith Porto de González y
Fanny Buitrago


La Asamblea General del VII Parlamento de Escritores e Intelectuales del Caribe Colombiano, en homenaje a Meira Delmar, Judith Porto de González y Fanny Buitrago, que deliberó en esta ciudad desde el 1 al 4 de julio de 2009, después de escuchar, analizar, debatir, y discutir las diferentes ponencias, conferencias y mesas redondas, y de elegir al escritor Manuel Guillermo Ortega como presidente del mismo, acordó las siguientes conclusiones:
1. Ratificar como sede del VIII Parlamento de Escritores del Caribe Colombiano la ciudad de Barranquilla, derecho que le había sido otorgado en la Asamblea realizada en julio del 2008.
2. Considerar la propuesta de la delegación de Bucaramanga, para realizar en aquella ciudad, un Encuentro de Escritores, como antesala al Parlamento de la Independencia que se realizará en Barranquilla.
3. Continuar con la política de expansión que ha venido realizando la Asociación de Escritores de la Costa, al invitar a participar, con voz y voto, a escritores de regiones diferentes al Caribe colombiano.
4. Impulsar entre los escritores colombianos la investigación y la creación relacionada con los temas históricos, especialmente con aquellos relacionados con la gesta emancipadora nacional.
5. Vincular a las diferentes etnias, aborígenes y afrodescendientes, para que participen como protagonistas de los próximos Congresos, con trabajos en sus lenguas nativas.
6. Vincular a Instituciones Educativas, de manera que haya una directa relación entre creadores e investigadores, explorando alternativas y posibles nuevos escritores.
7. Rechazar y condenar el sangriento Golpe de Estado que las fuerzas militares dieron a don Manuel Zelaya, presidente constitucional de Honduras, lo que sienta un peligroso antecedente para las Democracias del mundo y especialmente para Latinoamérica.
8. Reconocer el trabajo que viene realizando la Asociación de Escritores de la Costa y ratificarla como la única entidad con derecho a organizar el Parlamento.
9. Agradecer a la prensa escrita, a los noticieros de televisión y a la prensa hablada el apoyo que dieron al Parlamento ya que su difusión fue importante para el éxito del evento.
10. Agradecer a las diferentes organizaciones e instituciones que dieron su apoyo, especialmente al Ministerio de Cultura, el Fondo Mixto de Cultura de Bolívar, el Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena, el Fondo Mixto de Promoción de la Cultura y las Artes de Cartagena, el Museo Histórico-Palacio de la Inquisición, el Centro de Formación de la Cooperación Española, la Asociación de Maestros Jubilados de Bolívar (AMAJUBOL), Araujo y Segovia y a algunas personalidades, sin cuyo aporte hubiese sido difícil la realización de este VII Parlamento de Escritores.

Firmado
JOCE G. DANIELS G.
Presidente de la Asociación de Escritores de la Costa

MANUEL GUILLERMO ORTEGA
Presidente del VII Parlamento de Escritores del

sábado, 4 de julio de 2009

Nuevo Presidente del Parlamento

Manuel Guillermo Ortega

ELEGIDO POR MAYORIA DE VOTOS


Por más de cuarenta votos fue elegido nuevo presidente del Parlamento de Escritores del Caribe colombiano el escritor e investigador Manuel Guillermo Ortega, quien a veces firma sus trabajos literarios con el seudónimo de Guillermo Tedio.
Como ha sido tradicional y de acuerdo con los Estatutos, el Parlamento que es organizado por la Asociación de Escritores de la Costa, elige en su Asamblea Anual un presidente, el que orientará los debates que se susciten en ese período y además queda comprometidopara la organización del siguiente.
En la elección, además de las candidatura de Tedio, se postularon los nombres de Álvaro Suescún y el de Laura del Mar (Laura Margarita Medina) de la delegación de Bucaramanga.
El nuevo presidente se comprometió a trabajar conjuntamente con la Asociación de Escritores de la Costa, para la organización y realización del VIII Parlamento de Escritores del Caribe en la ciudad de Barranquilla, en el 2010 y dedicado al estudio de la Independencia Nacional . Ver biografía de Guillermo Tedio en este mismo blog.


Joce G. Daniels G.

Palabras pronunciadas en el acto de instalación del
VII Parlamento de Escritores e
Intelectuales del Caribe Colombiano
en homenaje a
Meira Delmar, Fanny Buitrago y
Judith Porto de González
“Para someter la ideología
y la política a los riesgos de la Literatura”

Cartagena de Indias,
1de julio de 2008
Museo Histórico de Cartagena –
Palacio de la Inquisición

Hoy hace exactamente cinco lustros, cuando muchas de las personas que se encuentran en este sagrado recinto, aún todavía eran unos bebés y otras daban los primeros pasos por las letras del abecedario, en Mompox, la primera ciudad que en el Virreinato de la Nueva Granada desafió el poder español y proclamó su independencia absoluta de España y de toda dominación extranjera, nos reuníamos en el marco del IV Encuentro de Escritores de la Costa, con el objeto de conmemorar el primer centenario de la muerte del poeta Candelario Obeso y de exaltar su exigua pero significativa obra para el pensamiento y la literatura colombiana y universal.
Posteriormente en esta misma fecha, en años recientes, ha sido tradicional el Parlamento de Escritores e Intelectuales del Caribe, que de una u otra forma ha exaltado los nombres de Juan José Nieto, iniciador de la novela histórica en Colombia, Abel José Ávila Guzmán, el infatigable fabulador de Lata, Jairo Mercado Romero, figura cimera del cuento colombiano, Jorge Artel, el más importante poeta colombiano del siglo XX y Manuel Zapata Olivella, el gran oricha de la diáspora de los negros africanos esclavizados y, naturalmente de sus ancestros afroamericanos.
Por eso, para utilizar una frase de cajón, hoy como ayer, nuevamente asistimos a una nueva cita del pensamiento, la reflexión, el análisis, la controversia y el debate, para escudriñar, escarbar y proponer las innovaciones y aportes a las letras nacionales de la narrativa de Fanny Buitrago, la poesía de Meira Delmar y el teatro de Judith Porto de González.
Acerca de la afirmación de que toda literatura es política, algunos escritores guardan reservas y otros simplemente discrepan, es necesario que en este Parlamento, en que habrá, además de los trabajos sobre las escritoras mencionadas, tendremos investigaciones acerca de la relación entre política y literatura, literatura e ideología, análisis a los trabajos y a la vida de Candelario Obeso y Jorge Artel, Ramón Finges y Antonio María Zapata, también en los foros se obtengan conclusiones que nos permitan ampliar la senda para que un futuro no muy lejano, la literatura sea de verdad verdad esté dirigiendo los hilos de la hermenéutica del poder.
Pero, antes de adentrarme un poco a esta gran utopía del Parlamento de Escritores, quiero de todo corazón, en mi condición de presidente de la Asociación de Escritores de la Costa, del equipo de trabajo, de los miembros de la Junta Directiva, del Coordinador del Parlamento, poeta Álvaro Suescun, y de quienes de una u otra manera han hecho su aporte a este evento, darles a todos ustedes, con el corazón en la mano como lo hacen los campesinos de mi pueblo Talaigua, un saludo de bienvenida, a la ciudad, Arcadia del Caribe, en donde según el poeta Luís Carlos López, /se come arroz, carne y arroz/. A los escritores de Medellín y Barranquilla, de Calarcá y Magangué, de Tolú y Santa Marta, de Bogotá y Sincelejo, de Riohacha y Corozal, de Necoclí y Bucaramanga, de Ciénaga y Montería, y naturalmente a los escritores de Cartagena.
También quiero agradecer a las instituciones y organizaciones que con su apoyo económico o en especie, hicieron posible la realización de este evento. Al Ministerio de Cultura, al Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena, al Fondo Mixto Departamental de Promoción de la Cultura, al Fondo Mixto de Promoción de la Cultura y las Artes de Cartagena, al Museo Histórico de Cartagena-Palacio de la Inquisición, al Centro de Formación de la Cooperación Española, a la Asociación de Maestros Jubilados de Bolívar AMAJUBOL, a don Florentino Borbúa, a la empresa Araujo y Segovia y, naturalmente a todos ustedes señores escritores que con su presencia garantizan el éxito del evento.
Este no es un Parlamento tradicional, como los parlamentos de lores y comunes, condes y plebeyos, pares y validos, senadores y representantes, burócratas y politiqueros, mandaderos y correveidiles, pícaros y rufianes, ediles y diputados. Este un Parlamento sin puestos y sin burocracia, sin leyes ni decretos, sin enmiendas y sin constituciones. Es un Parlamento sui géneris. Es un Parlamento de escritores y cuyos miembros se eligen por propia voluntad, sin ninguna clase de triquiñuelas, cocherazos o trampas. Gracias a Dios y a su Santidad el Papa Benedicto XVI, a San Agatón, patrono de periqueros, bailadores y toreros, no tenemos, representantes, delegados vitalicios y tampoco mensajeros en la Picota, Paipa o La modelo. El único salvoconducto para acceder a este Parlamento es la impronta de la palabra, oral o escrita.
De allí que la política del Parlamento no puede ser una política oficial de decretos y compromisos, tampoco de leyes y contubernios, sino que debe constituir un arriesgado experimento de alteridad, donde la única credencial que nos legitima para participar, hablar, debatir, controvertir y discernir es la palabra oral o escrita consignada en nuestras obras. Este Parlamento tiene marcada en su astrolabio, tiene señalada en su brújula, tiene signada en su proa, la ruta que le marca la literatura, y en especial, aquella que vislumbra un horizonte promisorio para las generaciones actuales y venideras.
Los escritores de hoy no podemos eludir o hacer gambeta a la situación que vive la sociedad, el escritor debe meterse de lleno en la sociedad, escarbar verdaderamente sus problemas y llevarlos al plano literario, debe haber un compromiso político, entendiendo este como lo entendieron los griegos, en tiempos en que gerontes y aedas se sentaban en los bancos del ágora para analizar los problemas de la ciudad, los problemas de los habitantes de las polis. El escritor no es político, pero sufre el ataque de la ideología política. El escritor no es ideólogo, pero sobre su obra cae el peso de la censura. El escritor no sociable, pero el Estado lo ve como subversivo de la sociedad. Si el escritor logra crear un mundo a su alrededor solo con la ficción, mucho más podrá atraer a ese público si su discurso es humanista y penetra en la medula de la propia sociedad. Ese imaginario narrativo que brota como una alfaguara encantada en la mente del escritor, también debe brotar como un imaginario social. No podemos quedarnos callados frente a lo que acontece a nuestro alrededor. Para nosotros es esencial que sepamos que miles de familias en el país, en estos momentos se encuentran bajo el peso del dolor y el sufrimiento por los falsos positivos. Que por las calles de ciudades, villas, pueblos, aldeas y laderas, deambulan familias enteras, unas refugiadas de la guerra y otras por los desplazamientos forzados. Que el crimen organizado acecha a quien discrepa de la política de seguridad del Estado. No debemos ser sordos a los clamores de cientos de indígenas que luchan y blanden el lábaro de la reivindicación de sus tierras que son usurpadas y sometidas por la clase oligárquica del país en connivencia con agentes del Estado. Tampoco podemos quedarnos callados, ante la arremetida del presidente Uribe, que a costa, de enmiendas y enmiendas, de reelección y reelección, con su cáfila de palafreneros y turiferarios en el congreso y en el gobierno, como los dictadores modernos quiere perpetuarse en el poder. El escritor no debe perder de vista la pérdida de valores que sufre el pueblo colombiano debido a la falta de atención del Estado y de estímulos que permitan un mejor estado de vida.
Este Parlamento debe ser celoso y denunciar toda clase de discriminación, especialmente la que sufren algunos afrodescendientes en Cartagena.
Hay que estar vigilante respecto a la censura y mordaza que el gobierno trata de imponer a aquellos medios alternativos que muestran la otra cara de la información. Sobre Hamlet, aún ochenta años después en Etiopía, pesa una orden de censura. La Literatura es materia de censura y de discriminación por que siempre es una expedición de la verdad.
Jorge Amado, uno de los escritores más vendidos del mundo, aún después de su muerte sigue siendo el más discriminado de los escritores en el Brasil, por las academias, que soslayadamente han tratado de opacar su grandeza, quizás porque en el año de 1951 la academia de ciencias de la URSS, le otorgó el premio Stalin de Literatura.
Saramago en su Ensayo sobre la Lucidez, nos induce a la reflexión política, y nos conduce asidos de la mano, en estos comienzos del siglo XXI, al diálogo sobre los problemas fundamentales que afectan al desarrollo de la sociedad mundial y al protagonismo del pensamiento y la reflexión en el orden de la organización y funcionamiento de las comunidades humanas.
El Matadero, de Esteban Echeverría, una obra de apenas 22 páginas que se encuentra por ahí tirada en el suelo, en esas librerías de a 2 por 3, es quizás la obra de más contenido político que se haya escrito en la historia de la Literatura Universal. El relato se centra en el momento inmediato posterior a la emancipación americana, momento en que reina el caos en Argentina y surge la figura de Rosas, un tirano.
Sabemos que las amenazas a la libertad intelectual no terminaron con la Edad Media o Hitler, ni con el colapso de la Unión Soviética. En el siglo XXI todavía hay individuos, organizaciones y gobiernos que tratan de controlar el flujo espontáneo de información que de alguna manera pueda poner en peligro su propia posición intelectual o estructuras de poder. Hay quienes oprimen al individuo abiertamente. Otros lo hacen en la oscuridad, donde reina el chantaje y la amenaza, especialmente cuando se aplican a quienes han sido o pueden ser despojados de asideros emocionales y económicos. De allí señores escritores que tenemos una gran responsabilidad con el país, con la sociedad y con nuestros literatura.
Antes de finalizar, en mi condición de capitán de este coloso que ahora es apenas un pigmeo, hecho con la estructura de nuestras voces y palabras, que surca contra viento y marea las procelosas aguas del Caribe, quiero agradecer públicamente la presencia en este acto de la Dra. Vilma Verbel Martel, secretaria de Educación y Cultura del Departamento de Bolívar, Dra. Gina Ruz Rojas, directora del Instituto de Patrimonio y Cultura de Cartagena, Dra. Viviana Gamboa, delegada del Ministerio de Cultura, Doña Marecela Nossa, gerente del Fondo Mixto Distrital de la Cultura, al Dr. Moisés Álvarez, director del Museo Histórico de Cartagena – Palacio de la Inquisición, a Doña Mara Berrocal, gerente del Fondo Mixto de Cultura de Bolívar, a la Asociación de Maestros Jubilados de Bolívar, a su presidente el eximio don Manuel María Maturana, al Centro de Formación de la Cooperación Española y algunas personalidades como don Antonio Botero Palacio, don Florentino Borbúa del Castillo, y las empresas privadas que nos dieron el aliento para luchar por nuestra causa, pues sin el apoyo de ellos hubiese sido difícil este evento y, naturalmente agradecerle también a los hijos bastardos y mayores de la tecnología: el computador y el Internet.
En fin podría expresar muchas, pero muchas opiniones, casi con la inmensa alegría que tuvimos hace veinticinco años bajo la fronda tupida de los ancianos sancuaraños en el bosque Santander de Mompox, cuando le tributábamos el primero de los homenajes, cien años después de muerto a Candelario Obeso, el iniciador de la poesía negra en América y por esos caprichos del inexorable dios Destino, en esta fecha le deparamos un homenaje a tres grandes femeninas de nuestra Literatura.
En fin señores escritores, asistentes a este VII Parlamento, no tenemos otra alternativa o seguimos como unos anacoretas o monjes del siglo XVI, observando desde los minaretes y murallones de los medievales castillos y conventos lo que pasa en el mundo o nos metemos de lleno en la sociedad, como esos toreros suicidas de la Plaza Majagual de Sincelejo, y pugnamos por un verdadero cambio social. El debate está abierto.
Muchas gracias